In the middle of the night.... [THOMAS]

Sus labios me atraían, disipando mis miedos que un poco antes se habían agrupado en mi mente y mi cuerpo.. sentirla así libre de miedos o al menos eso pensé, sus manos se mueven por mi espalda y me agito por desear moverme un poco mas, aun lo hago lento y suave sin entrar por completo en ella, pero sus manos me guían y creo que ella esta igual que yo, no aguanta mas el estar lejos de mi cuerpo.. sonrío entre sus labios y sigo el impulso de sus manos, al ritmo que ella me marca.. siento mas dentro mi miembro, y su cuerpo se curva con mi entrada y sus labios murmuran un gemido a media.. suspiro dejando sus labios de lado no porque no los desee, si no porque necesito respirar y jalar un poco mas de aire, empujo un poco mas y la desesperación parece, que quiere salir abruptamente pero miro a Elie y se en ese momento que no quiero hacerle daño, aunque me desespere y desee llenarla por completo, regrese a sus labios y entre completo en ella, sentí el apretón, sus músculos contrayéndose, al rededor de mi miembro y sus labios aun besando sin censar los míos, mis rodillas soporta el peso de mi cuerpo.. y mis brazos ansiosos sujetan su espalda para pegarla aun mas a mi.. comienzo a moverme un poco mas rápido pero deteniéndome de vez en cuando, para ver que no la lastime.. frunce el ceño pero no dice nada, me muevo de nuevo esta vez sin detenerme mas.. su cuerpo se estremece y mis labios besan sus hombros, la cama comienza a seguir nuestro baile, la ida y venida de nuestros cuerpos sobre las sabanas que se arrugan ante cada acto de ambos cuerpos.. la aferro un poco mas a mi, sintiendo su piel en la mía y su respiración agitada.. me enderezo un poco mas hincado en la cama y sentándola, sobre mi piernas.. la beso aun mas que antes y me desespero, bajando mis manos hasta sus glúteos, haciéndola subir y bajar sobre mis piernas.. me siento mas dentro de ella.. y jadeo con fuerza por la agitada respiración que necesito.

Estaba siendo tan cuidadoso conmigo. Tenía tanta delicadeza, no quería lastimarme. No iba a dañarme, lo cual lo hacía mil veces más especial. Todo cuanto sentía por él parecía estar intensificado. Tenía miedo, miedo de que no fuese lo que él esperara. Quería hacer las cosas bien, quería ser deseada y complaciente con él. Pero temía no saber hacerlo. Además, tenía miedo de que mi magia se volviese loca, mi energía iba en aumento, y cada vez que él me tocaba mi cuerpo reaccionaba de modos extraños. No quería imaginar que podría pasar cuando nuestros cuerpos se fundiesen en uno solo. Mis manos todavía acariciando su espalda, deleitándose con su calidez y delineando los trazos que marcaban sus músculos.
Entonces lo hizo, muy lentamente, entró en mi, sentía mis músculos contraerse, apreté mis ojos, cerrándolos con fuerza, pero no era tan doloroso como había imaginado, sólo un poco al principio, pero pronto se me pasó, cuando sentía que él y yo ahora eramos una sola persona. Mis manos descendieron hasta sus glúteos, y los apreté contra mi, como si quisiera sentirlo más en mi interior. Mi cuerpo lo recibía con anhelo, con ganas, mis caderas se movían en sintonía con las suyas, en un vaivén de movimientos, como si ambos lo hubiésemos hecho mil veces. Busqué sus mejillas con mis manos y atraje su rostro al mio, quería besar sus labios, no me resistía más tiempo sin hacerlo, sobretodo porque lo deseaba demasiado. Su sabor y su suavidad me encantaba.
Entonces, en un momento nada esperado, mientras él seguía moviéndose dentro de mi, mientras mi cuerpo estaba completamente deseoso de seguir así junto a él, las luces se fundieron, y todas las velas de la mesita de noche, del tocador e incluso del baño (las cuales podían verse desde el espejo de éste) estaban completamente encendidas. Supe que había sido yo, sin poder evitarlo. Mi energía pululaba por mi interior y él era el culpable de todas esas sensaciones nunca antes experimentadas que me hacían sentir de ese modo. Sonreí entre sus labios, y él hizo lo mismo, consciente de que no había sido casualidad. Entonces, mis manos buscaron las suyas, a tientas, por medio de las sábanas, en cuanto las encontré, entrelacé mis dedos con los suyos y ahí si pude apretar su mano con fuerza, conforme recibía cada una de sus embestidas.

La sujetaba con fuerza con mis dedos y sus dedos enredados los unos a los otros.. su agitación y la mía seguían el mismo rumbo el de complacernos ampliamente, encontré sus labios, no muy lejos de los míos y los bese con deseo y amor juntos porque eso es lo que siento por ella amor.. deseo.. pasión, mi cuerpo sigue en ella y siento su cuerpo recibirme de buen grado, mueve nuestras manos detrás de su espalda. haciendo que su pecho se pegue al mío y mis labios aun coman los suyos.. nuestras lenguas serpentean dentro de la boca de ambos, y mi respiración se hace mas acelerada.. la miro y sonrío entre el beso y el gemido.. el sudor comienza a aparecer fino y cálido entre los dos..
-Elie mi amor.-
Susurro en sus labios y bajo rápido a su cuello lo muerdo suave, deseando comerla a besos pero distraído por las embestida que mi cuerpo da en ella.. quiero cargarla llevarla contra la pared pero es la primera vez.. no debo forzarla y no quiero forzarla, quiero que se sienta bien a mi lado. las velas suben y bajan de intensidad.. es su poder su magia estoy seguro de ello porque es exactamente cuando la embisto con fuerza cuando las flamas de las velas bailan en un ritmo diferente.. abro mis manos aun con las de ella.. y las pego a su piel.. dejando que mi espalda vaya descendiendo.. sobre el suave colchón de su cama, la miro sobre mi cuerpo y le sonrío, quiero verla sobre de mi.. que me llene que me llene completamente con su cálida piel.. suelto sus manos y sujeto su cadera.. acomodo mis piernas y comienzo a moverla sobre mi..
Sin decirle nada mas que con mis actos.. le dejo ver que deseo que ella explore las sensaciones que puede sentir al moverse por si misma.. al acomodar su cuerpo sobre del mio, puedo sentir como me hundo mas en ella y como su cuerpo se contrae ante la profundidad que puedo alcanzar, gimo con fuerza la sensación es deliciosa.. mis manos la recorren encontrándose con sus senos firmes y tan redondos, sus pezones se endurecen los veo en punta y me enderezo para poder succionarlos.. los beso un poco, pasando mi lengua sobre ellos.. succionando primero uno y después el otro.. aun moviéndome lentamente, con suavidad esperando que ella me guié con sus movimientos.. no es mi primera vez.. pero si la primera vez que lo hago por que amo.. a la chica con la que estoy..

Mi respiración es cada vez más agitada y el sonido que sale de mi boca son los gemidos incontrolables que no puedo evitar dejar escapar. Y es que, no puedo imaginar algo mejor que esto. Su piel y mi piel, rozándose. Sintiendo su calidez sobre mi , sintiendo su miembro entrar en mi, con ganas, con fuerza, como si en el mundo no hubiese otra cosa más importante que yo en ese momento. Eso me hizo sentir especial. No sólo eso, sino también el modo en que lo hacía, delicado, atento conmigo, quería que yo disfrutase y que no lo pasara mal. Pocos eran los hombres, según tenía entendido, que hacían esa clase de cosas, lo que me hizo preguntarme si de verdad sentía algo profundo por mi. Ese hecho me hizo sonreír entre sus labios, ya que, justo en ese momento nos estábamos besando. Su lengua y la mía encontrándose, y no podía parar de hacerlo, pues se sentía demasiado bien. Morder sus labios y degustar su boca se estaba convirtiendo en una afición para mi.
Mis dedos y los suyos se entrelazaban, y pude sentir como la luz de las velas se volvía más fuerte a medida que él me penetraba. Parecían ir acompasados tanto mis poderes como el placer incontrolable de mi cuerpo. Temía que, pudiese hacer algo con magia que fuese incontrolable, pero esperaba no tener que llegar a esos extremos. Llevé mis manos a su espalda, recorriéndola, y fue justo entonces cuando aumentó el ritmo de sus embestidas que no fui capaz de soportarlo más y clavé mis dedos en ella, arañando su piel. Resultaba inevitable. Llevé mis labios a su oreja, y después de besar su cuello y morder su lóbulo, mis labios se acercaron a su oído y susurré con voz suave : Jamás había experimentado algo así. Te amo. Al parecer debía estarle agradecida, este era un momento muy especial, y sabía que no lo olvidaría en mi vida.
Entonces, de un momento a otro, era mi cuerpo el que estaba encima, estaba sobre él. Y mientras colocaba mis manos en su pecho, como tratando de impulsarme hacia arriba y hacia abajo, haciendo que su pene entrase y saliese en mi cuerpo primero lento y suave, traté de moverme de un modo que pudiese hacerle disfrutar, pues, a pesar de ser inexperta no quería que él se sintiese mal o que no lo pasase bien conmigo. Movía mi cuerpo en círculos, lentamente, y poco a poco me movía más rápido. En cierto modo me hacía gracia. Se asemejaba a "montar a caballo". Pero seguro que esto era muchísimo más saludable. Mientras seguía subiendo y bajando, me erguí un poco y besé de nuevo sus labios, como si fuese una necesidad imperiosa para mi ser. Como si mi propia alma lo necesitase.

Ella es mágica.. solo así podría explicar que sea tan increíble, su cuerpo cubrió el mio y sus movimientos me hicieron perderme en la pasión y puedo decir que en la lujuria, tome sus caderas tan suaves y redondas que mis manos se sienten dueños de ella.. la ayude a moverse aunque no necesita mucho de mi ayuda ella en si es tan perfecta que puede hacer de mi lo que le plazca, seguí cada contorno de sus curvas, que se mueven en un ritmo candente y suave.. demasiado placentero.. mi ser se excita solo de escuchar esos delicados gemidos que de sus labios salen, la miro a los ojos y nuestros labios se encuentran, mis manos desesperadas cubrieron sus costados.. buscando el espacio que no haya tocado con mis dedos.. se que eh pasado por sus caderas porque las sujete para hacerla subir y bajar sobre mi cuerpo.. se que pase por su cintura porque me aferre a ella mientras la embestía.. se que acaricie sus senos.. desde la ducha dese besarlos y lo hice los bese con desesperación, se que toque sus labios.. por que en este momento aun mi lengua se enreda en la de ella.. acaricie su espalda.. mis dedos no dejan de seguir esa curvatura en ella.. me falta su cabello su hermoso cabello que no deja de esparcir ese aroma a flores.. llevo una de mis manos a sus cabellos y lo acaricio.. haciendo que su cara se acerque mas a la mía y nuestros labios se abarquen con mas precisión.. jadeos y gemidos se enredan entre nuestras lenguas..
Respondo a sus movimientos, acelerando un poco mas cada arremetida bajo de ella.. soltando sus cabellos y posando mis manos en sus glúteos, desesperado por la sensación que sus movimientos me causan, aprieto sus glúteos haciendo que acelere un poco mas, dejo sus labios por necesidad de tomar mas aire, gimiendo con mas fuerza.. quiero decirle mil cosas pero en este momento es como si mi lengua se hubiera dormido.. me acerco a su oído y suavemente le murmuro entre un gemido corto.
-Yo también .. también te amo.. Elie mi Elie... luchare por darte todo lo que quieras y necesites.. mi mágica Elie.-
Una sonrisa afloro entre mis labios dejando una curvatura amplia.. pero haciendo que mi cabeza se echara hacia atrás, el placer se aumenta y es ella solo ella la que genera que mi cuerpo se estremezca.. sus movimientos hacen que mi cuerpo se contrajera, para intentar no dejarme ir.. en ella.. la mire a los ojos.. y se que no debería decir esto.. en un momento como este, pero no estoy preparado para.. ser padre y no se si Elie deseara ser madre tan joven como es... la mire a los ojos y apenado.. y excitado (una combinación demasiado rara ).. deje salir la pregunta de entre mis labios..
-Elie.. quieres que.. me venga en ti?-
Apretaba con mas fuerza mi voluntad la necesidad de estallar en el placer que ella me hace sentir.. pero no quiero afectarla ni hacer solo lo que yo desee..

Seguía moviéndome, cada vez más fuerte, más rápido, y eso hacía que las sensaciones aumentasen, me abrumasen y podría decir que incluso era capaz de desmayarme. Jamás había sentido algo así. Hasta ahora, el máximo placer, o la única vez que había logrado sentirme tan cómoda había sido con la magia, pero al parecer esto era mucho más que mágico, pues las sensaciones eran mucho más intensas. Sentía en mayor cantidad todo cuanto me ocurría y eso me abrumaba.
Mis manos y sus manos todavía unidas, nuestros dedos entrelazados, y mi cuerpo moviéndose de arriba abajo, mis senos agitándose conforme me movía, sentía sus ojos sobre ellos, poco a poco nuestras manos se fueron separando y en cuanto yo las dejé sobre su abdomen, él las llevó allí, a mis senos, donde rozó con sus dedos mis pezones y me hizo estremecer. La piel se me erizó como si tuviese frío, pero todo lo contrario, sentía oleadas de calor, de descargas eléctricas, como si una corriente estática se apoderase de mi y de mi cuerpo, incluso de mi propia alma, la cual estaría dispuesta a venderse al diablo por tenerlo a él. Por poder estar así como ambos estábamos ahora, eternamente.
Me preguntó entonces aquello, y no supe que responder. Sabía bien los riesgos que eso implicaba, pero suponía que, podía encontrar algún hechizo para evitar que me quedase embarazada o algo por el estilo. Todavía era joven, y no estaba preparada, o almenos eso pensaba yo, y además, dudaba que él quisiera tener un hijo conmigo.
No entraría en sus planes. Entonces no respondí. Ni siquiera me molesté en asentir. Me incliné sobre él, y atrapé su labio inferior entre los míos, mientras mi lengua buscaba la suya, para fundirnos los dos en un salvaje beso. Sonreí entre sus labios y supuse que eso sería más que suficiente para que entendiese que se trataba de un sí. No me importaba, de echo parecía incluso necesario que esa sensación me llenase, quería sentirlo dentro de mi, como nunca antes había sentido a nadie.

No respondió a mi pregunta o ¿si?.. sus labios me dedicaron un beso hermoso y único por lo que mi cuerpo reacciono sin poder dejar de llenar su cuerpo con mis movimientos.. poco a poco el beso se hizo mas pasional y mi cuerpo reacciono sobre el de ella.. la llene de mi de mi esencia y ella correspondía a con la suya, la abrace tan fuerte pero sin hacerle daño, jamas me sentí así, siempre fui un estúpido que solo se dejaba ir.. sin sentir lo que hacia, pero ella.. ella es mi luz mi vida.. nada de lo que antes he hecho se compara con tenerla así.. un pensamiento obscuro invadió mi mente.. ¿Soy bueno para ella?.. debía serlo, quiero serlo.. desperdicie mi vida, fui un monstruo que no pensaba mas que en el.. y con ella yo quiero ser algo mas, mucho mas, quiero ser el hombre que la haga feliz.. mi mente no dejo de pensar acababa de llenar su ser con el mio.. no me importaría ser padre pero ella.. ¿Ella quisiera ser la madre de mis hijos?, podría preguntárselo pero no en este momento.. ¿sera que no se lo que quiero?, no no.. si lo se la quiero a ella, y si ella quiere hijos yo no me ire, jamas lo haría.. la amo.. se que es estúpido que declare esto, pero no puedo mentir en como me siento.. como una persona que no debe nada y que ha ganado todo en la vida.. la gane a ella.. la tengo para mi, que mas quiero..
La abrazo aun mas y dejo que nuestros cuerpos se acomoden sobre la cama.. no quiero hacerle daño, me recuesto de lado con ella en mis brazos y nuestros cuerpos unidos en todas las formas en las que estamos.. mis manos toman una de las suyas y la sujeto enredando mis dedos en ella.. mientras que mis labios aun la besan en la frente, la mejilla el cuello, el hombro, no quiero dejar este momento lo deseo tanto y no quiero que ella desaparezca de mi vida.. pero no se que decir las palabras se me han ido de mis labios.. pero me esfuerzo en decir algo..
-Soy torpe hablando.. pero quiero que sepas que te amo.. Elie.. no quiero jamas perderte en verdad, se que fui un monstruo pero juro no hacerte daño jamas-
Es un juramento que cumpliré, sobre todas las cosas, nadie jamas me separa de Elie. Mi mente es un lió.. se lo que quiero pero me preocupa que le arruine la vida.. antes siempre traía condones conmigo, se que los riesgos son muchos pero el único que pudiera haber entre ambos es el que ella quedara embarazada, pero no me importaría... no se porque ese tema gira en mi mente.. lo alejo mientras mi dedo pasa por si espalda.. mientras nuestras manos aun están entrelazadas.. la miro y sus ojos brilla.. porque antes nunca pude ver eso en ninguna mujer?.. creo saber la respuesta.. es porque jamas las amaba y a Elie la amo..por sobre todas las cosas.. El aire frió traspasa las ventanas y se cuela entre nosotros.. la siento estremecerse, el calor del acto se ha desvanecido y aunque renuente a cubrir su hermoso cuerpo.. tomo la esquina del edredón y lo jalo para cubrirla un poco..
-Hace frió Elie y no quiero que enfermes.. -
La abrazo aun sobre el cobertor y siento su cuerpo tomar ese calor.. que sube hasta sus mejillas y se dibuja una sonrisa en sus labios.. bella.. hermosa mi Elie.. mi amor.. me quedo en silencio, contemplando el rubor de sus mejillas y sintiendo como poco a poco mi miembro se relaja dentro de ella.. los parpados se vuelven pesados el sueño, cansancio o sabrá dios que, me comienza a vencer.

Sonrío, jamás me había sido así de bien, así de completa. Ni siquiera se me ocurre algo que pueda estropear el momento, que pueda joderlo y eliminar la magia. Porque así ha sido para mi, algo mágico, inexplicable, algo que volvería a repetir una y mil veces, pero siempre con él. Con ningún otro. Me recuesto a su lado en la cama. Estoy de lado, y no puedo evitar mirarlo fijamente. Acaricio su mejilla, y siento que mis ojos brillan, emocionados. Estoy totalmente loca por él. Acabo de darme cuenta de ello. Lo necesito en mi vida, lo quiero, y no quiero que se aleje de mi, no quiero que me deje jamás. Porque no podría soportarlo. Sonrío. Recuesto mi cabeza en su hombro y aspiro su agradable aroma, como si tratase de grabarlo en mi mente, de memorizarlo sin piedad. Lo abrazo con fuerza, como si temiese perderlo.
Escucho lo que dice, y le creo, pero decido contarle lo que siento, quiero que sea consciente de lo que es capaz de hacer de mi, de mi corazón si me hiere. Cosa que espero no haga jamás, porque me mataría lentamente.
- Te amo. Jamás había sentido algo así por nadie, siento que mi corazón ya no es mío, ha dejado de pertenecerme, es tuyo, te lo entrego por siempre. Pero en tu mano está hacerlo trizas, romperlo, o cuidar de él. Sólo espero que elijas la opción correcta, en verdad no me gustaría tener que sufrir por amor. - finalizo, diciéndolo con total sinceridad. Lo miro a los ojos, sé que no me lastimará. Y no quiero que esto pase a ser algo horrible, quiero quedarme sólo con la sensación de sentirme plena. Repleta de él, de su esencia, de su fragancia, de su roce, de su amor. No quiero más. No necesito más. Lo beso de nuevo, de un modo, más que salvaje tierno. Quiero que sólo con mis labios sea consciente de cuánto me importa.

Fui abriendo los ojos con cada palabra que emana de sus labios, mis ojos recorren los suyos aun sin que ella me mire, dice la verdad.. me ama.. a mi! a este ser que no podría ser mas que un monstruo, alguien que no vale la pena, ella me quiere y esta confiándome lo mas valioso, su vida, su destino, lo quiere junto al mio, mis labios van curvándose sonriendole, llenando mis ojos mientras se encuentran con los de ella.. paso mi brazo por debajo de su espalda y la acerco aun mas a mi cuerpo.. aun estamos unidos pero no solo por carne, ahora por sentimientos, sensaciones, acerco mis labios a los suyos y la beso, del modo en que deseo hacerle saber que la amo, es mi vida y no solo por lo literal del echo que ella me regreso a la vida.. es mi vida porque solo ella apaciguo al monstruo depredador que era.. separo mis labios de los de ella y la palma de mi mano deja una caricia suave sobre su mejilla.
-Lo cuidare con todo mi corazón, Elie.. jamas eh amado a nadie, siempre fui un egoísta un desgraciado que solo pensaba en el.. pero no te fallare, porque fallarte a ti es fallarme a mi mismo, Te amo.. Te amo.. no sabia como hacerlo y tu con tu infinita bondad me has enseñado..-
Quería contarle que buscaría trabajo, que seria un hombre por primera vez por ella por nosotros, pero no importa en este momento solo importa que la amo, que me ama, que nos amamos.. bese su frente y después sus labios, adicto soy a ellos.. mi cuerpo salio del de ella.. debe descansar y no quiero ser la causa de su cansancio, aun hay puntos que cubrir en mi vida.. como una nueva identidad una nueva documentación, no podría usar la mía aunque podríamos irnos lejos donde no sepan que estoy muerto.
-Duerme un poco, te dejo agotada el traerme a la vida y solo eh hecho que te agotes mas con mis actos-
Aun sabiendo que es verdad sonreí no me arrepentía de haberle hecho el amor.. no porque la amo y porque se que ahora soy suyo, eso me llena el alma de un modo inexplicable, me muevo un poco mas deslizando mas el edredón sobre su desnudo cuerpo, no quiero cubrirlo pero el frió se va intensificando y el cansancio puede hacer estrago en su cuerpo, la abrazo a mi y hago que recargue su cabeza sobre mi pecho, sintiendo su respirar y relajando mis músculos ante el reposo.

Sonreí y me acurruqué aun más junto a él, con mi cabeza recostada en su pecho, mi mano acariciando su abdomen que subía y bajaba al compás de su respiración, mientras yo aspiraba el dulce y agradable aroma de su piel sudada.
No podía creerlo. Acababa de hacer el amor con él. Y había resultado mágico. Nunca mejor dicho, porque hasta mi magia había fluido de un modo insospechado. Desde luego lo que sentía por él era demasiado profundo como para ignorarlo. Sabía que, probablemente era una locura, podría decirse que eramos todavía dos extraños, no nos conocíamos demasiado, y sólo hacía un par de días que lo había visto por primera vez, y aun así había sentido esa confianza necesaria para desnudarme frente a él, para entregarme a él y dejarle hacerme sentir la mujer más plena y dichosa del mundo. Me sentía feliz. Tan feliz como nunca antes lo había estado. No podía negar que, con el tiempo, se estaba convirtiendo en alguien fundamental para mi.
Y mientras todos esos pensamientos llenaban mi cabeza, junto a los bonitos recuerdos de sus labios besándome, del frío aliento rozando mi piel, mientras sus manos recorrían mi cuerpo, su cuerpo y el mío fundiéndose, siendo un único cuerpo que podía derretirse en cualquier momento, todos y cada uno de los recuerdos de las sensaciones que él me había echo sentir me abrumaban. Me sentía satisfecha y plena, pero además de todo eso me sentía cansada, mis energías habían disminuido notablemente, sobretodo porque apenas había comido nada, así que cerré los ojos, lentamente con lo que pesaban mis parpados cedí al cansancio, pasando a pertenecer profundamente al mundo de los sueños.

(Cerramos este tema y hacemos uno nuevo?)